Tras el fiasco de Gijón, ese jugado a ritmo de torneo de
verano, ese que quitó las ganar de ver y escribir sobre fútbol, el Athletic
debía dar un paso adelante para evidenciar que camina hacia la puesta a punto
necesaria para competir en una temporada, a priori, ilusionante.
Y algo cambió con respecto a Gijón, con una semana más de
preparación, con la motivación adicional de recibir a un Barça al que plantarle
oposición con el vigor mostrado contra el Sporting hubiese sido sinónimo de
encajar una goleada de escándalo.
Así que con más voluntad que acierto, con más trabajo que
talento, el Athletic se afanó en intentar complicar la vida a un Barcelona que
se mostró sobrado para ganar a los rojiblancos sin tan siquiera tener que forzar
la máquina. Dio la sensación, incluso de que se vieron tan netamente superiores
los culés que hubiesen podido pagar cara su suficiencia, pero los leones no golpean
aún con contundencia. Aduriz, el llamado a seguir marcando camino, sigue
pagando con una preocupante falta de frescura su aventura internacional y Raúl,
el otro que debe dar miedo a los rivales, se muestra aún sin el rodaje necesario
por la inoportuna afección de corazón que ha retrasado su puesta a punto.
El resto, máxime con la baja de un San José que hoy por hoy
no tiene sustituto en el centro del campo, se las vieron y desearon para neutralizar
la circulación de balón a ritmo salvaje del Barcelona.
Y así la receta fue un
desgaste físico máximo por parte de los de Valverde, seguramente encarnado ello
en la actuación de Susaeta, que acabó extasiado extenuado.
Pero poco más. Son muchas las incógnitas que deja el
Athletic por resolver. Poniendo de nuevo todas las velas a Aduriz, que cada año
que pasa resulta más probable que su fútbol pueda apagarse, en que Raúl apunte
algunas de las cosas que de él se esperan de manera más regular que en el
ejercicio anterior, con la triste evidencia de que Iturraspe parece no estar
por ser incapaz de dar continuidad a su talento y de interpretar los claros
mensajes que el entrenador le transmite, la constatación de que la plantilla
adolece de un segundo central de garantías o de que de Marcos recupere su punta
de velocidad.
Pudo el Athletic haber puntuado, por la indolencia
blaugrana, porque en fútbol la insistencia tiene premio, pero pudo también
encajar varios goles si los culés no hubiesen apuntado fuera en prácticamente
todas sus llegadas.
Solo cabe esperar que el equipo aproveche el parón para
finalizar la puesta a punto. Y quien sabe si podrá el club reforzar el equipo
de alguna manera, que movimientos parece haber en ese sentido.
Siendo una
garantía que el Club no se va a volver loco, que por mucho que apunten lo de
Oiarzabal fue otra de las verbenas que montan en Gipuzkoa, todo aquello que permita
dar alternativas a Valverde en algunas posiciones será una buena noticia.
Espero que hayas tenido un buen verano, Gontzal.
ResponderEliminarPara ganar al Barcelona hay que hacer un partido superlativo y ayer estuvimos bien, sin más, plantando cara. Creo que el Barça sí se tuvo que emplear a fondo pero no están al 100%, nosotros tampoco.
Tenemos jugadores que tiene que irse poniendo a tono, los has mencionado, y otros como Iturraspe o Muniain que tienen pinta de haberse perdido en una sima muy profunda.
No me parecería mal fichaje el de Berenguer, en banda izquierda estamos fatal y un central es necesario pero eso lo veo imposible.
Lo de Oiarzabal ha sido un sainete cocinado entre Aperri y Vcento para servirse conevneientemente emplatado a comienzos de Liga. Un héroe que rechaza tentaciones del enemigo pero al que le ponen una cláusula superiro para que no se vaya al enemigo. Si tan seguros están de su fidelidad, para qué ponerla a prueba.
¿Susaeta extasiado? Me he debido de perder algo...
Atendiendo a las imágenes de televisión en el momento de su sustitución admirado Contini.
EliminarRecuerda, tú que eres de inmejorable memoria futbolística, aquello de los pollos sin cabeza de Toshack, por hilarlo con lo de la Real.
Lo de Iturraspe es lamentable, y bien que lo siento, que virtudes atesora como nadie. A Muniain hace tiempo que le di por perdido para esto de ser algo en el fútbol, ha hecho bandera de la intrascendencia y, además, el teatro en que ha convertido su vida (dentro y fuera) hace que ya nadie le señale ni un penalti por los excesos en las actuaciones.
Supongo que será Berenguer a lo máximo que podamos aspirar, tal y como se ha puesto esto del fútbol vasco, pretenden hacernos pagar el surimi a precio de caviar. Eso sí, cuando vienen de Alemania, España o Inglaterra, entonces sí, se vende lo que haga falta a precio de saldo.
Claro que ya sabemos que las aficiones futboleras son dóciles y fáciles de engañar. Es juntarse el tal Izquierdo y Aperri un momentito, y montar un culebrón para tener henchidos de gozo a los aficionados blanquiazules.
Aunque, eso sí, no olvidemos que aquí también nos venden lo que quieren. Que todavía hay quienes siguen aplaudiendo y sonriendo tras aquella rueda de prensa del maño más british .
Extenuado quise decir, Contini. Acabo de releer el texto y los comentarios debidamente tras recibir un guasap reiterando lo del extásis. Vaya gamba. Ya lo decía Fito, las prisas no son buenas.
EliminarVocento, convenientemente, superior... Yo también me he extasiado.
ResponderEliminarAhora que hago memoria, sí que el bueno de Markel tenía una cara en el banquillo como de haber visto a Reiziger o a Migueli.
ResponderEliminarUn gusto volver a leerle, Sr. Gontzal,
ResponderEliminar¿No cree usted que realmente el Athletic quiso pagar la clausula de Oiarzabal?
He escuchado y leido a periodistas ajenos a Vocento sostener que así fue. Otra cosa es que luegoo se de a la historia el barniz que se quiera.
Un cordial saludo.
Manuel Palomares
Pues no, no me creo nada de una operación que ascendía a una barbaridad de dinero por un jugador aún no contrastado, pero pueden insistir JOL y resto de colegas de Vocento, que son unos perfectos generadores de realidades virtuales, principalmente a base de repetir machaconamente mentiras que la mayoría acaba dando por verdad.
EliminarQue el Athletic habló con padre (además de representante) del jugador, no lo dudo. De ahí a ofertas en firme y comunicaciones de pago de cláusula, creo que hay una distancia sideral.
Y ya que desde Ibaigane se llamase a la Real Sociedad para comunicar la intención de pago de cláusula sin acuerdo con el jugador, me parece de película de Paco Martínez Soria.